El pasado viernes, se llevó a cabo una significativa reunión en la Ruka ceremonial de Llolleo, donde varias educadoras y educadores tradicionales de la provincia se congregaron junto a autoridades de la comunidad Mapuche. Este encuentro contó también con la participación de directores de establecimientos educacionales y representantes del Ministerio de Educación, todos unidos en un esfuerzo por validar y promover la educación intercultural.
Durante la jornada, las comunidades Mapuche y los directores de los establecimientos educacionales que han estado implementando la educación intercultural desde el año pasado, reafirmaron su compromiso con la reivindicación de una deuda histórica con la cultura de los pueblos originarios. Este evento se destacó por su enfoque en la validación de educadores tradicionales, quienes tendrán la responsabilidad de transmitir la cosmovisión, el idioma, las danzas y otros aspectos de las culturas de los pueblos originarios en los años venideros, contribuyendo así a su revitalización.
Desde la visión de la unidad de medio ambiente del DAEM de El Quisco y de la unidad de asuntos indígenas de la municipalidad, esta reunión subraya la importancia de integrar la biodiversidad (Itrofil Moguen) y la cosmovisión de los pueblos originarios en la educación tradicional. En esta cosmovisión, los Ngen (espíritus de la naturaleza) y la Ñuke Mapu (madre tierra) juegan un papel crucial, alineándose con los principios de las líneas de medio ambiente que se vienen trabajando en nuestra comuna.
Se validaron siete personas de la comuna: cinco del pueblo Mapuche y dos del pueblo Chango. Este logro ha sido posible gracias a la gestión de Bianca Rodríguez, encargada de medioambiente del DAEM, bajo los lineamientos de apoyo con la oficina de asuntos indígenas a través de su encargado Mauricio Llanca.
El DAEM de El Quisco ha estado a la vanguardia en la implementación de talleres y actividades que buscan insertar la educación intercultural en el currículum nacional y, por ende, en el PADEM. Esta labor continuará siendo una parte esencial de la coordinación de medio ambiente, promoviendo una educación que respete y valore la diversidad cultural y natural de nuestro territorio.